Cuando llegas, se olvidan todas mis penas.
Cuando llegas, una sonrisa se dibuja en mi rostro.
Cuando llegas, me alegras la vida.
Cuando llegas, te abrazo fuerte a mis brazos, querida.
Cuando llegas, tu mirada por fin se encuentra con la mía.
Cuando llegas, comprendo porque eres para mi corazón tan querida.
Cuando llegas, el silencio nos rodea a los dos.
Cuando llegas, comienza a latir con fuerza mi corazón.
Cuando llegas, nos tomamos de las manos y juntamos nuestros labios.
Cuando llegas, aquella eternidad sin ti, se esfuma en un segundo.
Cuando llegas, no existe nada más que tu y te conviertes en mi mundo.
Cuando llegas, te cuento lo mucho que te extrañe.
Cuando llegas…te confieso que nunca te dejo de querer.
MANUEL ALTEZ.
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